La Provincia de Tucumán parece no haber recorrido ni un poco el camino del feudalismo al capitalismo siquiera. Tucumán y más que nada sus políticos de ágoras de burdel. se enorgullecen de ser una “Provincia Pro Vida”. Así las cosas, sus diputados y senadores, fueron fundamentales para que la no sea Ley el Aborto Legal Seguro y Gratuito. También son abanderados en pretender encontrar consentimiento en las niñas para hacerlas madres y en torturarlas a través de la maternidad forzada como ocurriera hace meses atrás.
Esta vez un joven trans fue violado y la Policía tomó la denuncia de acuerdo a su doble rasero moral, es decir poco les importa lo que le ocurra a las disidencias. El estado provincial siempre ha protegido a violadores, proxenetas y violentos de todo tipo y parece seguir en la misma tesitura por siempre.
A continuación, les brindamos el clarificador y conmovedor en el que Lucas cuenta el horror que debió sufrir y cómo fue tratado por las autoridades.
Alejandro Geyer, organizador de la Marchapor la Vida en la Autónoma
Este 23 de marzo, encabezados por grupos nacionalistas y demás facciones de la derecha católica, se llevó a cabo una multitudinaria marcha del sector antiderechos autodenominado PROVIDA. Los organizadores de la misma estiman la concurrencia en 250000 personas. cifra que no vamos a discutir, concediendo desde ya que la marcha fue multitudinaria. Hubo otras marchas en las principales ciudades de todo el país en lo que se dado en llamar “Marcha por la Vida” que se realiza. La marcha trata de coincidir con el “Día del niño por Nacer” instaurado por decreto en 1998 por el, a la sazón, Presidente de la Nación, Carlos Saúl Menem, que es el 25 de marzo. Desconocemos las razones por la que esta marcha se hizo el día 23, si el día 25 es el día que dicen conmemorar.
Dejada atrás la parte meramente informativa del evento antiderechos, vamos a centrarnos en la voz de ellos que son los organizadores de este marcha y los mismos que hablaron en el Congreso.En la marcha del 23, específicamente, uno de sus organizadores, Alejandro Geyer, concedió una entrevista de nueve minutos al canal noticioso TN. En la cual, amén de intentar sostener con su poca dicción (ya conocida por sus inentendibles alocuciones en el Congreso durante el debate sobre la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo) las posiciones cada vez más totalitarias de ese sector, dejó en evidencia que dos de las más profundas inhumanidades de los llamados PROVIDA. Una la continua visión de las niñas como máquinas de gestar y, sin que nadie se lo pidiera, Geyer llegó a deslizar la postura en la que estos movimientos son irreductibles, de ver el consentimiento en niñas de 10 años. Sobre todo esta última cuestión es la más grave, pretender que una niña puede prestar consentimiento, aún pasándose por las partes el mismísimo Código Penal y su visión de lo que es el estupro. No creo que haya sido otro de los fallidos a los que Geyer nos tiene acostumbrado. No lo es, es una posición que sostienen poniendo siempre la carga de la duda en la conducta de la víctima a la que hasta le quitan el derecho a decidir y la someten ala tortura de obligarlas a parir como lo hicieron en Tucuman.
A continuación, les brindamos el video con las escalofriantes declaraciones de alguien que no es un autorsolo un autor de exabruptos y fallidos, si no que muestra lo que piensa este sector de la sociedad y su cultura punitiva aún de las niñas y la defensa acérrima de los derechos del violador, buscando el consentimiento donde no lo puede haber ni importa si lo hubo.
En Asamblea Plenaria realizada en la UNC este 18 de marzo, la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito aprobó presentar un nuevo proyecto de IVE, para el mes de abril en diputados. Si bien aún no se determinó la fecha exacta de la presentación se aseguró que se llevará a cabo una marcha de pañuelos para el momento en que se efectivice la misma.
Más allá de que algunos sectores de esta lucha, planteaban la inviablidad estratégica del proyecto, en el caso de las mujeres y disidencias la agenda electoral poco tiene que ver con la cohesión del colectivo más poderoso del país. Asimismo, el plenario pidió a los candidatos y candidatas que se expidan sobre el particular.
El demonio de la violencia patriarcal hacia las mujeres parece no tener límites en este 2019, no respeta edades y el Estado se muestra muy complacido con imponer sus criterios de defensa de los violadores aún si se trata de aplicar el tormento de la maternidad forzada a una niña de 11 años. Desde 1920, el Código Penal reconoce el derecho a interrupción legal del embarazo en caso de violación, pero las autoridades tucumanas se pasaron la ley por las partes, ellos quieren mantener su caracter de Provincia Pro Vida a como dé lugar.
Desde el momento en que una niña de 11 años queda embarazada, ni siquiera existe preguntarse si hubo o no violación ya que es evidente que poco importa revisar consentimientos y más cuando la víctima y su madre denuncian el hecho ante la autoridad competente. La niña violada fue sometida a dilaciones que la ley no evalúa para aplicar el procedimiento de interrupción del embarazo. Aquí concurrieron muchas y muy variadas instituciones y formas de perpetrar el hecho de la tortura de una menor.
Empezando por lo más alejado de los estratos del Estado, hay profesionales de la salud que se declaran objetores de conciencia, si alguien no puede aplicar un procedimiento médico sería entendible si no fuera un médico, pero que un galeno se permita elegir que procedimientos aplica y que no es una tremenda fantochada solo sostenible por el fanatismo a ideas que nada tienen que ver con la ciencia de curar. No entregan sus matrículas por ineptitud y sin embargo son los principales aliados de los antiderechos para bestialidades como forzar una cesarea a un feto inviable. Particularmente resulta nauseabundo que se tolere desde el Estado esta conducta de parte de médicos, aunque tampoco sorprende ya que aquí el Estado jugó en el mismo sentido y con un cinismo criminal.
